martes, 27 de octubre de 2015

ANDY WARHOL: EL COLOR DEL POP ART


Andrew Warhola fue el artista plástico más influyente del "Arte Pop". Hombre polifacético que alcanzó fama mundial no sólo por sus creaciones artísticas sino por su marcada personalidad lo que le convirtió en icono de la modernidad.

Nació en Pittsburgh, EE UU en 1928 y su familia era de origen eslovaco. A partir de 1949 se estableció en Nueva York y comenzó una brillante carrera como dibujante publicitario trabajando para famosas revistas entre ellas Vogue y The New Yorker. 






También trabajó como publicista independiente para la discográfica RCA en el departamento de diseño de portadas de discos y cartelería. Otra faceta a la que se dedicó fue la pintura y sus obras seguían la temática basada en objetos o imágenes de la vida cotidiana y pronto comenzó a exponer en diversas galerías.

Progresivamente fue eliminando de sus obras los rasgos expresionistas y las redujo a repeticiones seriadas de un elemento popular del mundo del consumo, de los medios de comunicación o de la cultura de masas. A partir de 1962 comenzó a utilizar la técnica de la serigrafía, mediante la que reproducía personajes míticos de la sociedad de su tiempo como Marilyn Monroe, Elvis Presley, Elizabeth Taylor, Jaqueline Kenedy.







De la misma época es la famosa serie de las latas de sopa Campbell y los botellines de Coca-Cola. 




También plasmó en contraste con la tématica anterior, situaciones reales trágicas como accidentes, funerales, luchas callejeras, etc. Dentro de esta línea destaca la serie de "La silla eléctrica" (Electric chair, 1971).



En 1963 creó la "Factory", un taller en torno al cual se reunieron personajes de la cultura neoyorquina underground que con su imagen extravagante y frívola marcaron tendencia. El propio Warhol se convirtió en un icono muy peculiar de aspecto andrógino, siempre peinado con un característico flequillo rubio, imagen que explotó conscientemente para promocionarse,  él mismo pasó a ser un producto publicitario más.



También en 1963 comenzó su obra cinematográfica basada en los mismos principios que su obra plástica: la reiteración visual. En su primera etapa la temática era erótica aunque progresivamente volvió a un formato más tradicional.




En 1968 sufrió un atentado en la Factory, en el que resultó gravemente herido y que supuso un cambio importante en su forma de valorar la vida. La década de los 70 fue más tranquila, dedicándose a ser emprededor de negocios. 




Funda la revista Interview y decora coches de carreras para la BMW. 



Continuará haciendo retratos de artistas famosos como los de Mick Jagger, Liza Minnelli, John Lennon, Diana Ross, Brigitte Bardot y Michael Jackson. 










En la década de los 80 realizó interpretaciones de obras de arte de pintores como Botticelli, Da Vinci o Munch que causaron una gran polémica. 






 En 1986 pinta lo que serán sus últimas obras, autorretratos y retratos de Lenin y Mao Tse Tung.




Su obra de potentísima fuerza visual, gracias al conocimiento que tenía sobre el medio publicitario, resulta siempre provocadora tanto por el uso del color, a veces monocromo y otras fuertemente contrastado, pero siempre vivo y brillante, como por la temática, a veces trivial y frívola y otras trágica y angustiosa.
























Su ambición artística le llevó a ser imparable en todas las facetas de la producción artística, siendo promotor y productor de otros artistas pintores, escritores, autores de teatro, músicos a quienes promocionaba en sus carreras como a la banda The Velvet Underground y al cantante David Bowie.









Murió en Nueva York en 1987, a los 58 años, cuando estaba convaleciente de una intervención quirúrgica.

1 comentario:

  1. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar